6 de septiembre de 2011

Gestionar Proyectos: Más Sociología y menos Tecnología


Los proyectos fracasan la mayoría de las veces no por la innovación tecnológica que suponen. ¡A veces, un proyecto fracasa sencillamente porque Pepe no se habla con Juan! La ausencia de “habilidades humanas” explica muchas veces el porqué de la imposibilidad de cerrar los requisitos, de superar las pruebas de aceptación, de la baja productividad, del excesivo retrabajo, retrasos, sobrecostes, etc. ¿No será la nuestra  una profesión donde la Sociología tiene más peso que la Tecnología?

Pocas profesiones hay más orientadas a objetivos que la del Director de Proyectos. Además, es extraordinariamente injusta, porque si el proyecto es un éxito nadie nos felicita, pero si es un fracaso, entonces la culpa es sólo nuestra. El inconveniente es que el trabajo del proyecto no cae en nuestra zona de control, sólo podemos coordinar lo que hacen otros.